MIES llega con ayuda a los damnificados en la provincia de Bolívar
(Foto: En Bolívar se atiende a damnificados en cantones San José del Tambo, San Pablo de Amalí y Balzapamba)
El mal clima y las fuertes lluvias afectaron a la población de los cantones San José del Tambo, San Pablo de Amalí y Balzapamba pertenecientes a la provincia de Bolívar. Varias familias fueron atendidas inmediatamente por el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) ante el deslave y el desbordamiento del río Chillanes, que provocó la destrucción de sus casas.
El viernes anterior, luego de la fuerte tempestad, una parte de la provincia de Bolívar fue declarada en emergencia debido a los desastres que la naturaleza ocasionó.
MIES Guaranda llegó con ayuda para 440 personas que han perdido todo debido al desbordamiento del río y deslaves provocados por el mal clima, se les ayudó con kit de aseo, limpieza, raciones alimenticias e implementación de la cocina para que las familias puedan estar adecuadamente por el tiempo que pase la emergencia.
Oswaldo Bayes, director del distrito Guaranda manifestó que el MIES se solidariza con los damnificados que han perdido a sus familiares y sus viviendas. “No existen palabras de aliento para calmar el dolor que sienten, pero estamos aquí para llegar con un granito de arena y ayudarlos para que puedan salir adelante de la mano de cada uno de nosotros; también se complementará la ayuda con la entrega de ropa y vituallas, ayuda sicológica a las víctimas, registro de más familias afectadas y sensibilización sobre prevención de desastres”, señaló.
Se encuentran activados 2 albergues en San José del Tambo, mediante gestión del Ministerio de Inclusión Económica Social (MIES). Se llegó con kit de aseo, raciones alimenticias, ayuda humanitaria a las 201 personas que se encuentran albergadas en estos dos puntos de emergencia.
Ángel Añamañay, presidente del barrio San José pide a las autoridades pertinentes, que lleguen con la maquinaria necesaria para comenzar con el dragado del rio, y agradeció al MIES por la ayuda que les brindó de manera inmediata al momento de la tragedia. “Gracias a ustedes por ayudarnos con los alimentos que necesitamos, no teníamos nada que dar de comer a nuestros hijos”.
Así mismo en Chaupiaco, parroquia Balzapamba, se estableció un alberge para las 32 familias que se encuentran en ese lugar, las mismas que por los deslaves perdieron sus viviendas y todos sus enseres.