“La discapacidad no es un impedimento para cumplir sueños”
“Para mí la discapacidad no ha sido impedimento para cumplir mis sueños”, así lo aseguró, César Choto, durante la ceremonia de graduación como médico general de la Universidad Nacional de Chimborazo. Él es usuario del centro de acogimiento para personas con discapacidad física, Fundación “Jesús Resucitado”, el mismo que funciona a través de convenio entre el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) y el Gobierno Autónomo de Penipe.
César, de 25 años de edad, oriundo de la comunidad San Antonio del cantón Guamote, tiene discapacidad física y desde el 2003, gracias al trabajo del MIES y la Fundación, recibe cuidados, terapias y atención especializada. Para él, la mejor rehabilitación es “permitirles hacer lo que les gusta, sentirse productivos y superarse a través del estudio”, afirmó.
César Daqui, Coordinador del MIES en la zona 3, destacó el esfuerzo realizado por su tocayo, al tiempo que recordó a los asistentes que el Gobierno Nacional, a través de sus diferentes instituciones ha fortalecido el trabajo en beneficio de las personas con discapacidad. “Nuestra misión además de asegurarles una vida digna es lograr su inclusión económica y social”, manifestó.
Al igual que César, otras 20 personas con discapacidad física se benefician, no solo de las terapias y cuidados diarios, sino también de talleres de formación continua y proyectos innovadores como la fábrica de calzado Vinicio y otros que se implementan con el objetivo de insertarlos en el ámbito laboral.
El MIES en la zona 3 (Ambato, Latacunga, Puyo, Riobamba) brinda atención integral a más de 830 personas con discapacidad, a través de 29 unidades de servicios en las modalidades de atención domiciliaria, diurna y residencial. De igual forma, mantiene activos 15 convenios con GAD municipales, parroquiales, organizaciones religiosa y de la sociedad civil. La inversión en 2017, supera los 677 mil dólares.