Anthony Carlosama, de 3 años de edad, acompañado de sus padres llegó hasta el auditorio Monseñor Leonidas Proaño, en la ciudad de Ibarra. Estaba feliz y con una gran sonrisa repetía una y otra vez que se va a graduar. Y es que él al igual que 38 niños y niñas más, ayer finalizaron su paso por  el Centro Infantil del Buen Vivir- CIBV,  Dr. Jaramillo Pérez y  recibieron su diploma que acredita el inicio de su nueva etapa de educación.

El acto contó con la presencia del coordinador Zonal 1 del Ministerio de Inclusión Económica y Social-(MIES), Germán Flores, la directora Distrital Shannon Cadena, padres de familia y educadoras.

En su intervención el Coordinador Flores, dijo que se están haciendo cambios fundamentales en el país y que parte de esos nuevos procesos, son las construcciones de 250 CIBV en el país, por cada año hasta el 2016, para atender a 90 mil niños y niñas.

Dio a conocer a los asistentes, que el CIBV está entre los cinco mejores del país, por la infraestructura con la que cuenta y por la calidad y calidez con la que son atendidos quienes diariamente asisten a este espacio. Finalmente, el Coordinador Zonal,  expresó a los padres de familia su agradecimiento por confiar en el desarrollo de sus hijos, dentro de este Centro Infantil del MIES.

Shannon Cadena, directora distrital de Ibarra, dijo que los niños y niñas que finalizan su educación mostraron pasos firmes en la construcción de su plan de vida y en este momento están listos para ingresar a la fase de educación inicial.

Raquel Tejada, en representación de los padres de los graduados agradeció a las maestras y  autoridades del MIES, por la atención que recibieron. “Siempre han estado pendientes del desarrollo de nuestros niños y niñas. En el Centro Infantil sentimos calidez y la enseñanza que recibieron nuestros hijos fue de calidad. Ellos están listos para emprender una nueva etapa”, comentó la madre de familia.

Además, este espacio fue aprovechado por el Comité de Padres de Familia para entregar una placa de reconocimiento al CIBV Dr. Jaramillo Pérez, por sus 75 años de creación. El acto formal  finalizó con el coro infantil de los graduados, quienes se despidieron del Centro con la canción “Adiós jardín Querido”.