En Loja, MIES garantiza atención infantil integral, a través de Misión Ternura

Atender de manera integral a niñas y niños, desde la gestación, con énfasis en los primeros mil días de vida, es el objetivo de “Misión Ternura”, estrategia emblemática del Gobierno Nacional, parte del Plan Toda Una Vida, que en el distrito Loja del Ministerio de Inclusión Económica y Social, permitirá atender a cerca de mil infantes de los cantones Saraguro, Chaguarpamba, Olmedo, Paltas, Celica y Pindal.
Fabián Herrera, director del MIES en el distrito Loja, menciona que actualmente se lleva a cabo el proceso de identificación de domicilios de niñas y niños menores de tres años, así como a mujeres embarazadas, quienes tras ser censados constan en la matriz de Misión Ternura y no acceden a ningún servicio por parte del MIES u otra Cartera de Estado. La autoridad refiere que adicional a esta actividad, se desarrolla la capacitación y formación continua de educadores familiares de cada una de las comunidades de intervención.
Según el director, también se trabaja en la conformación de unidades de atención con las familias de los usuarios, además de la coordinación de visitas domiciliarias semanales. La siguiente fase, señala, contempla la realización de reuniones con los integrantes del hogar para establecer los acuerdos iniciales de atención, además de determinar núcleos y redes de familias e identificación, adecuación y ambientación de espacios físicos.
Rocío Granda, coordinadora del MIES en la zona 7, enfatizó en que una de las etapas fundamentales de Misión Ternura, es el seguimiento nominal “pues llamaremos a cada infante como se lo merece, con su nombre y apellido”, expresó. En este contexto, precisa, se verificará peso, talla, estado nutricional, logros de desarrollo y estado emocional de los niños, sin olvidar el acompañamiento a sus familias y el proceso de sensibilización y movilización de toda la sociedad.
Aníbal Calderón, morador de Pindal, considera fundamental brindar atención integral a niñas y niños, sobre todo en los primeros mil días de vida, “esa es la etapa más importante en el desarrollo de nuestras guaguas”, dice. “Criar y educar con ternura no solo es responsabilidad del Estado, nosotros los padres somos el pilar en el que se sustentará el futuro de nuestros hijos”, enfatizó.