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En el Circo Social las personas con discapacidad descubren sus talentos

Un grupo de usuarios del MIES observan a una de las estrellas del Circo Social fue parte del Circo del Solier

Portoviejo, 08 de octubre de 2019.

A través de un convenio de cooperación entre el Ministerio de Inclusión Económica y Social- MIES y la Organización No Gubernamental Circo Social, un total de 33 personas con discapacidad de Portoviejo y sus cuidadores, se capacitan en artes circenses (expresión asociada con el circo) y a la vez disfrutan de un espacio de inclusión y recreación.

Este proyecto se lleva a cabo en la Casa de la Cultura de Portoviejo, mismo que inició en septiembre y se desarrollará por tres meses, tiempo en el cual artistas replican sus conocimientos y entrenan a un grupo de personas de diferentes edades, con y sin discapacidad.  Las personas con discapacidad son usuarios de los servicios del MIES, que asisten a la carpa junto a sus familiares dos veces a la semana, cuyo objetivo real no es solamente la ejecución técnica y perfecta de los malabares, acrobacias o equilibrios, sino que lo importante es el desarrollo integral de la persona.

De acuerdo a Geovany Chago, que es uno de los entrenadores, los participantes dejan sus preocupaciones y temores, consiguiendo olvidarse de sus problemas. “Dentro del grupo de personas con discapacidad ya se están descubriendo talentos que estaban escondidos”, indicó.  Pero, no solo darle la oportunidad a quienes pocas veces la tienen, es el objetivo de este proyecto, además a través de ejercicios como malabares y acrobacias, se desarrolla la motricidad fina y gruesa, estimulando la actividad de los hemisferios cerebrales.

Jhonny Sonorza, cuidad de su hermano Antenógenes Sornoza, quien tiene el 75% de discapacidad intelectual y recibe el Bono Joaquín Gallegos Lara de $240; ellos son parte de los programas del MIES; para Jhonny acudir al circo social en compañía de su hermano, ha sido de gran ayuda. “Mi hermano realiza todos los ejercicios que les enseñan, lo que le ha permitido mejorar su carácter, disminuir su agresividad e incluso le han ayudado a desenvolverse mejor en sus actividades diarias”, destacó.

De acuerdo a Julia Moreira, técnica para la atención a las personas con discapacidad, en este proyecto se refleja la inclusión porque el trato es igual para todos. “El grupo es muy sociable, no hay discriminación, todos trabajamos en familia para conseguir un solo resultado”, indicó Moreira, de la fundación FADINAF que es cooperante del MIES para la atención a 150 personas con discapacidad de Portoviejo; de los cuales, 10 de ellos optaron por ser parte del Circo Social.

El MIES en el Distrito Portoviejo, que comprende ocho cantones de la provincia de Manabí, cuenta con 70 convenios de cooperación con diferentes organizaciones, mediante el cual brinda el servicio de atención en el hogar y la comunidad a más de 2 mil personas con discapacidad.