Pedernales recibe el tercer CIBV emblemático tras terremoto

El nuevo CIBV emblemático "María Luisa" en Pedernales tiene una cobertura para atender a 60 niñas y niños, de 1 a 3 años de edad.

“Tiempo atrás existían lugares llamados guarderías, donde nuestros niños solo comían y dormían, ahora tenemos estos Centros Infantiles del Buen Vivir, donde desarrollan destrezas y están bien cuidados”, dijo Germania Cevallos, representante de las madres y padres usuarios del CIBV emblemático “María Luisa”, obra entregada esta mañana por el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) en beneficio de la comunidad de Pedernales.

El moderno centro, cuya capacidad de atención es de 60 niñas y niños de 1 a 3 años, en el que laboran seis educadoras y una coordinadora, brindará estimulación temprana, repotencialización de habilidades y talentos, cuatro ingestas diarias con los nutrientes adecuados para su crecimiento y sobre todo trabajo en conjunto con la familia.

La ministra Lídice Larrea, durante el acto inaugural, hizo énfasis de la labor cumplida por el gobierno en la presente década, donde se refirió a las obras en el sector social en la provincia de Manabí, “en la actualidad las madres de familia pueden trabajar con la seguridad de que sus hijos quedan bien atendidos en la formación de la primera infancia plena, en la que a través del país se atienden a casi 300 mil niñas y niños”.

De su parte a la vicepresidenta (e), Sandra Naranjo, destacó la importancia de los servicios, “los hospitales, las escuelas, los centros infantiles, reflejan vida porque éste proyecto está aquí para transformar sus vidas y es uno de los más importantes para el gobierno es el desarrollo infantil”.

En Pedernales, este es el tercer CIBV emblemático que el Gobierno Nacional entrega, a través del MIES, luego del terremoto.

En toda la zona 4, que incluye Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas, el MIES atiende a 44 mil niñas y niños de 0 a 3 años a través de 728 unidades de servicios de CIBV y la modalidad Creciendo con Nuestros Hijos, con una inversión que supera los 10 millones de dólares, a fin de acercar los servicios a las poblaciones de atención prioritaria de pobreza y extrema pobreza.