Con la fe puesta en la recuperación: las familias afectadas por las lluvias se recuperan

El apoyo del Gobierno Nacional en temas de provisión de albergues es oportuno en tiempos de lluvias.

La temporada invernal se presentó de manera sorpresiva y tomó desprevenida a algunas familias en sectores cercanos a ríos y proclives a deslaves en  las de Guayas, Los Ríos, Santa Elena, El Oro, Manabí, Santo Domingo de los Tsáchilas,   Esmeraldas, Bolívar, Azuay, Loja, Napo, Orellana  y Pastaza.

 La primera alerta de que el invierno sería fuerte se dio en Ponce Enríquez, provincia del Azuay, en un pequeño poblado de familias dedicadas a la pequeña minería sufrió los embates de un deslave que dejó algunas perdidas humanas y heridos también. La acción del MIES y de las otras instituciones del Estado entre ellas la Dirección de Gestión de Riesgos fue oportuna para socorrer a las familias y reubicarlas en lugares seguros.

Uno de los primeros pasos es verificar que los albergues cuenten con cierto número de condiciones para su funcionamiento y esa tarea específicamente se la encarga al MIES. Luego inicia la reubicación y provisión de colchones, mantas, toldos para que las familias cuenten con las mejores condiciones para esta corta estancia. Asimismo, el MIES se encarga de proveer de alimentos no perecibles y agua.

A escala nacional se  activaron 34 albergues, dando atención a 217 familias. La Atención Humanitaria del MIES comprende: activación de albergues y casas de hogares acogientes, entrega de raciones alimenticias, kit de vituallas, bono de emergencia, kits humanitarios, recuperación socio-afectiva. Se han entregado  1 992 raciones alimenticias entregadas a escala nacional.

Por otro lado, y  después de un censo que realizó la Coordinación Zonal 8 del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) junto a la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) y el Ministerio Coordinador de Desarrollo Social (MCDS), 12 de las 101 familias que permanecían en los albergues Néstor Campusano y Fermín Vera Rojas retornaron a sus hogares, al determinarse que estos no estaban en situación de riesgo.

Más de 300 personas fueron reubicadas al plan habitacional Socio Vivienda 2, en Guayaquil. Tras afrontar fuertes estragos las familias accedieron a viviendas dignas y con todos los servicios básicos. La acción fue coordinada entre el Ministerio de Vivienda, la Secretaría de Gestión de Riesgos y el Ministerio de Inclusión Económica y Social.

Mientras que en  la zona 7  (El Oro, Loja y Zamora Chinchipe) se invirtió $13 450  para ayudar a las familias afectadas.